Señalaron que desde que les fueron adjudicadas las viviendas tuvieron inconvenientes porque cada vez que se presentaba un proyecto para concretarla, la empresa proveedora les pedía obras complementarias que consistía en colocar válvulas para la presión de gas.
“En agosto del año pasado iban a empezar las obras complementarias, así lo anunció el señor gobernador (Omar Gutiérrez) en campaña. Y con ADUS es imposible comunicarnos. Lo único que hace es cobrar la cuenta del banco y nada más”, señaló en diálogo con LU5 Claudio Jara, vecino de las 49 Viviendas.
Sostuvo que para los adjudicatarios era imposible afrontar los costos de esa obra, dado que tenía un valor que triplicaba el de la red de gas. “En noviembre hablamos con (intendente) Soledad Martínez y la pagó la Municipalidad. Había que hacer la instalación domiciliaria, prácticamente todo nuevo porque Camuzzi nunca había aprobado las cañerías que habían”, explicó Jara.
Compraron artefactos y para el 20 de enero estaba la obra concluida. “Cuando fuimos a solicitar el medidor nos encontramos con la sorpresa de que no nos pueden largar el gas porque no había presión. Si antes aprobaron el proyecto me imagino que habrán tenido en cuenta la presión del gas”, observó Jara.
Con los primeros fríos del otoño y el invierno en puertas, los vecinos aún se lamentan de continuar con la misma situación año tras año. Indicaron que gastan en promedio, de 5 mil a 8 mil pesos en boletas de electricidad porque usan artefactos eléctricos para calefaccionarse; seis garrafas de gas por mes y 100 kilos de leña.
“Lo más molesto es que a cuatro cuadras se hizo otro plan de viviendas similar al nuestro y a ellos le pusieron el gas mientras nosotros no, seguimos esperando. No es por ellos, pero nosotros estamos hace seis años sin gas”, cerró el vecino.
Compartinos tu opinión