Y el vecino de Zapala y la región tendrá que seguir haciendo malabares con los diferentes incrementos en este 2018. La nafta sufrió un nuevo aumento que ya se plasmó en los surtidores de la localidad.

El nuevo cuadro es el siguiente:

Nafta super: pasó de costar 21,51 a 22,78 lo que marca un incremento del 5,90%.

Nafta Infinia: pasó de costar 25,19 a 27,44 lo que marca un incremento de 8,93%.

Ultra diesel: pasó de costar 22,69 a 23,82 lo que marca un incremento de 4,98%.

Infinia Diesel: pasó de costar 26,32 a 28,67 lo que marca un incremento de 8,93%.

La actualización de los precios de los surtidores no se hizo esperar. Un minuto después de caído el pacto que había sellado el ex ministro Juan José Aranguren con las productoras de combustibles para mantener los precios sin cambios, las YPF neuquinas ya habían actualizado sus precios.

Aquel pacto fue aceptado a regañadientes por las petroleras a instancias de la fuerte presión de Aranguren, quien asumió la negociación, a la vez presionado por las autoridades económicas que buscaban evitar el impacto de los combustibles en la creciente inflación.

Aranguren pactó directamente con las autoridades de YPF, Pan American Energy (que opera la red Axion) y Shell. El resto de las compañías, que ostentan porciones menores de participación en el mercado nacional de los combustibles, siguieron las pautas manteniendo sus quejas por lo bajo, sin espaldas para salir a chocar contra la administración nacional. Aranguren dejó una bomba de tiempo entre los surtidores de los combustibles del país tras abandonar la cartera de Energía, echado por Macri.

En el último trimestre del año pasado, el ex presidente de Shell, quien desembarcó en la función pública de la mano del PRO, liberó totalmente el mercado de los combustibles. Es decir, libró los precios a los vaivenes de la cotización mundial del petróleo atada al dólar. El pacto de mayo fue un freno a esa política, pero en los días sucesivos se desbocó el dólar empujado por una corrida que hasta el viernes era imparable.